miércoles, 27 de mayo de 2009

Te quiero


Cierro los ojos y veo su dulce imagen en mi cabeza como si ella fuera la reina de todo mi ser. Y pensándolo bien, lo es.
Me levanto de la cama con una velocidad que no supe que tenía y pronto me encuentro con el aroma de su perfume. Aquel que le regale cuando solo éramos mejores amigos.
Al salir al balcón para despejar mi mente siento que no ha sido buena idea. Recuerdos me vienen a la mente; cada noche solíamos salir a mirar las estrellas hasta que ella se quedaba dormida en mi pecho.
Como la echo de menos y lo que más me impone es que la deje ir sin hacer nada por retenerla.
El recuerdo que más me importa es cuando me decía aquella frase que me alegraba el día “Te quiero”

0 cuento(s) de hadas:

Publicar un comentario

chicles de fresa