What if...?

Cualquiera que logrará verme en este estado no tendría perjuicio demasiado bueno hacía mi. Y la verdad es que no culparía a esa persona por algo que se ve a primera vista.
Con mi vestido roto por los dobladillos de abajo y sucio al igual que mis sandalias por un pequeño problema con un charco que había en la acera, digamos que no lo vi.
Mi vestimenta puesta a conciencia por mi aquella misma tarde había quedado hecha añicos. Y todo ello para nada porque todas mis esperanzas de que esta noche fuera una de las más especiales de mi vida se habían ido al igual que Chris, se había de mi lado para siempre y no había a volver para arrepentirse de lo que había hecho. Con lo único que se disculpo por haber arruinado aquella preciada noche para mi, fueran unas míseras palabras “Esto no funcionaria por mucho tiempo más, Nayara”.
¿Pero qué pasaría si yo quería probar si funcionaria? ¿Qué pasaría si yo lo necesito a mi lado? ¿Qué pasaría si yo lo quiero? Nada. No pasaría nada. Todo se quedaría igual que esta ahora, con mi corazón hecho pedazos como mi vestido azul de seda.
Lo único que puedo hacer ahora es seguir sentada en la arena mirando al horizonte y que la lluvia cubrá mis lágrimas tristes.